Aunque Rumanía es un país de la Unión Europea como el resto, parece que para el gobierno español se trata de ciudadanos de segunda, sin los derechos que en teoria tienen todos los ciudadanos de la Union. Claro que teniendo en cuenta que tanto el gobierno español como la U.E. estan principalmente al servicio precisamente de los que han provocado la crisis economica, las grandes empresas y los banqueros, se entiende que mientras a aquellos se les ayuda de cualquier manera posible a los trabajadores en general y a los rumanos y bulgaros en particular se les haga pagar las consecuencias.
En una situacion sin precedentes, el gobierno de Zapatero da una vuelta de tuerca mas sobre los trabajadores y mientras sigue adoptando medidas para aumentar los beneficios de sus amos, los grandes capitalistas, recorta derechos y salarios a los que producen la riqueza del pais, los obreros. Precisamente la excusa del alto desempleo provocado en España por la politica del "ladrillazo" iniciada por la ultraderecha del Partido Popular y continuada obedientemente por los "socialistos" del PSOE (al fin y al cabo ambos partidos son alimentados por la misma mano corrupta y mafiosa) es la que ha llevado al ejecutivo a tomar la decision de limitar la entrada libre al mercado laboral español a los dos ultimos paises incorporados a la U.E., Rumania y Bulgaria.
Curiosamente, mientras Zapatero y sus secuaces hacen genuflexiones a todas las sugerencias llegadas desde Bruselas cuando se trata de beneficiar a banqueros y grandes empresas, ahora resulta que los trabajadores de la Union Europea, ese proyecto que se vende como la union de todos los ciudadanos de Europa pero que en realidad es la excusa para defender los intereses de los grandes y verdaderos ladrones del continente, no son todos iguales. Asi que se volverá a exigir a partir del proximo 1 de agosto un contrato laboral previo a los ciudadanos rumanos que quieran venir a trabajar a España, como si se tratara de extracomunitarios. Se trata evidentemente de una medida discriminatoria, a pesar de que el propio gobierno rumano diga que no es asi, sino solamente una medida tecnica (al fin y al cabo a los miembros del gobierno rumano le importan tan poco los trabajadores de su pais como al español los del suyo).
La propia Comisión Europea (CE) también duda de la legalidad de la decisión, aunque tambien dudaba de la deportacion de ciudadanos rumanos de Francia realizada por "Napoleon" Sarkozy y al final, como no perjudicaba los unicos intereses que defiende la UE, lo de los grandes magnates y empresas, se llevo a cabo sin ninguna oposicion de las instituciones europeas.
Lo curioso es que el "racismo" institucional del gobierno Zapatero ha encontrado aliados entre los propios rumanos que trabajan en España, que no seran afectados por la decision, ya que muchos creen, como se puede leer en el siguiente articulo de Publico , que la medida es correcta y que la entienden (¿será que el desempleo que esta afectando tambien a los trabajadores rumanos hace que se vea con disgusto que lleguen nuevos competidores, aunque sean compatriotas, y pese a que la limitación signifique una agresion evidente contra sus propios derechos como ciudadanos de la UE?
En España hay mas de 800.000 rumanos, y la tasa de desempleo general, del 21 %, se convierte en un 30% en lo que se refiere a este colectivo. Se trata del mismo tipo de actitud que toman muchos trabajadores de los paises receptores de inmigracion ante lo que les han enseñado a creer una amenaza a su empleo, cuando la verdadera amenaza está en su domesticación y su consecuente falta de resistencia y unidad.
Lamentablemente, el racismo institucional prende rapidamente entre los propios trabajadores que, como en tantas otras cosas, son engañados facilmente para que se limiten a defender sus intereses particulares en vez de a tener una perspectiva y conciencia de clase, para que asi permenezcan siempre debiles y, por lo tanto, los gobiernos puedan defender sin oposicion mayor los intereses de las grandes capitalistas.
Y es que en realidad se trata de lo mismo de siempre. Mientras los trabajadores no se unan para defender sus intereses comunes, los regimenes al servicio del capitalismo siempre encontraran como hacer que estos sigan perdiendo derechos y abaratando su fuerza de trabajo, y que, en conjunto o por partes, acaben pagando las consecuencias del saqueo y los delitos que los grandes magnates y empresas cometen impunemente contra los derechos y la riqueza colectiva.
No hay derecho. O son de la Unión Europea o no lo son, pero que no nos vengan con el cuento del libre tránsito de personas para luego hacer lo que quieran. O, si quieren ser coherentes, entonces que dejen la UE, ¿no?
ResponderEliminarCorect spus.
ResponderEliminarRomanii sint considerati in toata Uniunea Europeana ca cetateni de rang inferior. Doi, trei, patru.
Am colegi si colege care au fost angajati(e) in Franta si li s-a spus deschis: Aici cistigati de 10 ori mai mult decit in Romania, sa munciti de 10 ori mai mult.