Uno de los primeros grabados de la ciudad, SXVII |
Vlad Tepes, además de ser el personaje que parece ser dio lugar a que el britanico Bram Stoker se inventara la leyenda de Drácula, pasó también a la historia por ser el primero en mencionar la ciudad de Bucarest en un documento. Aquella mención se celebra ahora anualmente como la de la fecha oficial del nacimiento de Bucarest, aunque probablemente ya existiera antes.
En una carta fechada el 20 de septiembre de 1459 , firmada por el entonces domnitor (señor) de Valaquia, Vlad III Drăculea o Ţepeş El Empalador, se habla de Bucarest por primera vez, en referencia a su fortificación., en la que confirma la donación hecha a unos pequeños propietarios; dicho documento puede verse hoy día en el Museo Nacional de Historia.
En el texto de 1459, Vlad III se dirige a tres personajes llamados Andrei, Iova y Drag disculpándoles del pago de sus obligaciones (el diezmo y los derechos aduaneros por el comercio con ovejas, cerdos, abejas, grano y vino) con el objetivo de fortalecer su relación y asegurar sus haciendas de Ponor, en Oltenia. En el texto del documento, escrito sobre pergamino en lengua eslava, la lengua institucional por aquel entonces, y en grafia eslavona, que seria la utilizada en Moldavia y Valaquia hasta su union en 1859 bajo el principe Alexandru Ion Cuza, que oficializó el alfabeto latino.
Literalmente la carta dice que el documento fue “escrito el 20 de septiembre en la fortaleza de Bucarest en el año de 6968” (1459), lo que confirma que entonces era ya una ciudad fortificada.
En una carta fechada el 20 de septiembre de 1459 , firmada por el entonces domnitor (señor) de Valaquia, Vlad III Drăculea o Ţepeş El Empalador, se habla de Bucarest por primera vez, en referencia a su fortificación., en la que confirma la donación hecha a unos pequeños propietarios; dicho documento puede verse hoy día en el Museo Nacional de Historia.
En el texto de 1459, Vlad III se dirige a tres personajes llamados Andrei, Iova y Drag disculpándoles del pago de sus obligaciones (el diezmo y los derechos aduaneros por el comercio con ovejas, cerdos, abejas, grano y vino) con el objetivo de fortalecer su relación y asegurar sus haciendas de Ponor, en Oltenia. En el texto del documento, escrito sobre pergamino en lengua eslava, la lengua institucional por aquel entonces, y en grafia eslavona, que seria la utilizada en Moldavia y Valaquia hasta su union en 1859 bajo el principe Alexandru Ion Cuza, que oficializó el alfabeto latino.
Literalmente la carta dice que el documento fue “escrito el 20 de septiembre en la fortaleza de Bucarest en el año de 6968” (1459), lo que confirma que entonces era ya una ciudad fortificada.
La carta donde se menciona por vez primera a Bucarest |
La primera persona que trató de determinar el momento exacto de la fundación de la ciudad fue el teniente-coronel Dimitrie Papazoglu en 1891, quien llegó a determinar su fundación en el primer tercio del siglo XIV, entorno al 1330; hipótesis ésta desechada por la inmensa mayoría de los historiadores, quienes creen que en fechas tan recientes si bien es posible la existencia de algún núcleo habitado, éste no pasaría de ser un pequeño pueblo.
En 1781, el viajero suizo Sulzer afirmó que el nombre de la ciudad derivaba de la palabra Bucurie (“alegría”), de lo cuál concluyó que la ciudad podría ser denominada como “La ciudad de la alegría”.
En la primera década del siglo XIX apareció un libro en Viena, escrito por otro viajero que había visitado la ciudad, en el cuál se afirmaba que el nombre de la ciudad derivaba de un bosque de hayas situado en los alrededores, llamado “Bukovie”.
Sin embargo, no fue hasta 1820 cuando no se popularizó el famoso mito de creación de la ciudad obra de un pastor llamado Bucur; el artífice de dicha popularización fue el cónsul inglés en Bucarest, sir Wilkinson, quien en un libro publicado en Londres explicó pormenorizadamente dicho mito: la leyenda afirma que en las vegas del río Damboviţa vivían pequeñas comunidades de hombres; en un momento dado llegó al lugar un pastor llamado Bucur (quien daría nombre a la ciudad), junto a su gran rebaño de ovejas y sus múltiples ayudantes; tras asentarse en el lugar, el grupo debía soportar estoicamente los ocasionales saqueos de diferentes pueblos, hasta que en uno de ellos los saqueadores raptaron a la hija de Bucur; entonces, el grupo se decidió a luchar, y tras una dura batalla vencieron a los invasores y recuperaron a la hija de Bucur; para evitar futuras acciones de saqueo, Bucur decidió levantar altas y sólidas empalizadas, que formarían el núcleo fundacional de la futura ciudad de Bucarest.
Bucarest, principios del siglo XVIII |
Asi que, y volviendo a Vlad Tepes, aunque posiblemente existía desde décadas un grupo más o menos denso de población, Vlad Ţepeş decidió fortificar la ciudad y darle así rango “casi” de capital (siguió manteniendo formalmente la capital de Valaquia en Targoviste, aunque fue ya Bucarest la ciudad fortificada más importante del Principado).
El motivo que impulsó a Vlad Ţepeş a fortificar Bucarest fue el de seguramente conseguir formar un núcleo poderoso militarmente en el sur del territorio, cerca de la frontera danubiana, desde el que entablar relaciones comerciales fluidas con el Imperio Otomano, y poder defender el camino hacia la capital, Targoviste, ante la previsible, y despues efectiva, invasión.
El primer documento escrito que atestigua documentalmente la existencia de la ciudad es una carta firmada por Vlad Ţepeş el 20 de septiembre de 1459 (escrita en búlgaro, idioma diplomático del Principado de Valaquia entonces), en la que confirma la donación hecha a unos pequeños propietarios; dicho documento puede verse hoy día en el Museo Nacional de Historia.
Vlad Ţepeş decidió establecer la fortaleza de la ciudad teniendo como referencia el río Damboviţa; han llegado a nosotros los restos (restaurados en el siglo XVIII por primera vez) de su palacio, llamado Curtea Veche. En su interior se pueden observar los restos arquitectónicos del palacio, estelas funerarias de diferentes épocas e incluso el lugar donde se encuentran las calaveras de algunos de los nobles que se opusieron a su gobierno.
En 1659 Bucarest se convirtió ya oficialmente en capital de Valaquia (Ţara Românească); en 1692 el Domnitor (“Señor”, cargo que ejercía el gobierno sobre la región) Constantin Brancoveanu diseñó y ordenó construir la primera gran arteria de la ciudad, Podul Mogoşoaiei (El Puente Mogosoaiei), enorme avenida construida en madera (de ahí su nombre, a la manera de los puentes hechos con vigas de madera de roble); dicha avenida es hoy día conocida con el nombre de Calea Victoriei (Calle de la Victoria, en conmemoración del reconocimiento internacional de la independencia de Rumania efectuado en el Congreso de Berlín de 1878).
Debido al material perecedero (madera fundamentalmente) y a la ausencia de verdaderos arquitectos de calidad, el patrimonio arquitectónico de Bucarest anterior a 1800 es casi inexistente.
Ruinas de la Curtea Veche y busto de Vlad Tepes |
En 1859 es proclamado “Domnitor” (literalmente “Señor”, aunque entendido como “Príncipe”) tanto del Principado de Valaquia como del de Moldova el coronel Alexandru Ion Cuza; en 1862, Cuza decide establecer el gobierno de ambos principados en Bucarest, ciudad que asumirá oficialmente su rango capitalino con todos los efectos oficiales a partir de 1877.
En resumen, los bucarestinos celebraron el fin de semana pasado el 552 aniversario de la ciudad, en conmemoración de la carta en la que Vlad "el empalador" firmó el primer documento oficial en que se menciona la ciudad.
En la actualidad el Ayuntamiento quiere, con fondos de la Unión Europea, y en el marco de la restauración integral del casco histórico, rehabilitar la Curtea Veche, como las calles de su alrededor, presidida por un llamativo busto de Vlad Tepes, todavia para muchos, el mismo Drácula.
2 comentarios:
Parece que ya estas consultando algunas fuentes rumanas en materia de historia, no como hasta ahora que solo mencionabas material escrito por otros(en especial enemigos de Rumania-y esto que Rumania no se ha metido con nadie hay muchos que se meten con Rumania)
Los paises poderosos no tienen ningun respeto por los paises pequeños como Rumania y queren hacerlas mas pequeños aun......y tu como un tonto te haces ecco de la historia que han escrito ellos para Rumania.
Tu has escrito en tu blog de la misma manera que los hebreos(judios sionistas) escriben la historia de Palestina y los teritorios ocupados, osea nunca van a decir algo a favor de los palestinos........ con la misma analogia nunca los rusos o los turcos o los austrohungaros van a decir algo bueno de Rumania......asi que me doy cuenta que amigo de Rumania seguro que no lo eres, eres un francmason o algo asi?
Ultimamente Rumania esta atacada por los judeomasones ,con claros intereses economicos,acaparan todo lo que ha quedado despues de Ceausescu,pero no comprendo que persigues tu con tus posts ..... veo que no dices nada de los judios que con su capital han comprado casi la mitad de Rumania,han modificado leyes en su favor y hacen que desean en Rumania...... porque no denuncias esto?
Los masones judios que mandaban antes han vuelto ahora desde EEUU y Suiza
Hola Anonimo Gañan. Esta vez he publicado tu comentario porque parece que estas estudiando y has aprendido a dar algun argumento (bastante flojo, por cierto) y a no insultar como unica base de tus mensajes...
No obstante te diria que leyeras mas sobre la historia de tu pais, pues el patriotismo no es solo amar tu bandera y pegarte con los fans del equipo enemigo (Dinamo-Steaua, etc...), sino conocer, buscar, indagar, sobre la historia de tu pais, pues la mejor manera de amar a alguien o a algo es conocerlo y descubrir lo que no se dice.
Suponiendo que sepas leer, lo que esta claro es que de Rumania conoces poco. En mis blogs, por cierto, critico toda forma de imperialismo, y por eso apoyo la causa palestina, la causa de la Rumania Socialista (no la fascista plegada a los intereses de Alemania o Estados Unidos), y la de todos los pueblos del mundo que defiendan su soberania nacional (incluso si no son socialistas), es decir, el derecho de sus gentes a gobernar su propio pais. Eso en Rumania solo ha pasado, a lo largo de la historia, durante 45 años, y no a la perfección.
Hay muchas cosas que cuestionar (¿no te enseñaron a pensar por ti mismo en el cole?). Por ejemplo, el mismo termino "Rumania" es ambiguo, porque Romania era, en tiempos, todo el territorio donde se hablaba latin, e incluso los otomanos llamaban Rumania a el territorio otomano de Europa. La invención de este nombre tiene que ver con el deseo de la oligarquia valaca de ser vasallos de los franceses y los occidentales, mientras masacraban y explotaban a su pueblo al que solo le interesaba (como ahora sigue siendo asi) que sean rumanos cuando se trataba de ir a las guerras o para recoger los impuestos.
Las cosas son mas complicadas de lo que dice la tele y las versiones oficiales, asi que a ver si sientes por fin el verdadero amor a tu pais en vez de ser un mercenario vendido con, como diria Nietzsche, que seguro te gusta aunque nunca hayas leido, "alma de esclavo".
Salud y Revolución!
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