El tren de la vida, de Radu Mihaileanu

"El tren de la vida" gano en 1999 el Premio de la Crítica y Mejor Ópera Prima en el Festival de Venecia. Su director, el rumano Radu Mihaileanu, es el autor de éste tragicomico guion en el que se cuenta la historia de una comunidad judia que huye al otro lado de la linea del frente, hacia la Union Sovietica, ante la llegada del ejercito aleman.

Para hacerlo, los judios fingiran ser un grupo de deportados en un tren que se dirige hacia la frontera, con un grupo de sus miembros disfrazados de soldados alemanes como vigilantes. Las peripecias que sufren en el camino son un retrato de la crueldad del genocidio nazi, aunque contado de un modo comico basandose en que el argumento es una confusion entre la realidad y el sueño de un loco.

El guion no solo tiene como protagonista a las victimas del holocausto judio, sino que en una de las quizas mejores escenas del film, el tren de los supuestos deportados se encuentra en el camino otro tren tambien falso pero en este caso con una comunidad gitana en la cual se tomó la misma decision: fingir su propia deportacion para escapar de los criminales. En el encuentro, las dos comunidades celebran una fiesta en la que ambas compiten con sus musicas e instrumentos propios, ademas de dar lugar a la mezcla etnica entre ambas. Por cierto que la banda sonora es del siempre espectacular Goran Bregovic, que nos ofrece una extraordinaria demostracion de distintos temas y estilos de los Balcanes.

Por cierto que en el film tambien se aprovecha para critica a la ideologia comunista, parodiando al grupo de judios de la comunidad que intentan organizar la lucha a su manera, aunque por supuesto no se dice en ningun momento que el tren se dirige hacia la salvacion, es decir, a la Union Sovietica, cuyo pueblo al final liberaria a toda Europa de los crimenes del nazismo (al menos hasta 1991).

El tono de comedia surrealista utilizado para narrar la tragedia provocada por los nazis sobre el pueblo judio y otras minorias puede llegar a chocar un poco, pero a traves de la parodia, y ya que resulta que toda la historia es solo el sueño de un loco (un loco visionario), solo se pretende hacer mas digerible el fruto del capitalismo prebelico (que los capitalistas de hoy intentan definir con un concepto aislado, como si el fascismo no fuera el extasis del capitalismo).

En definitiva, una pelicula interesante y recomendable, que a pesar de ser dirigida por un rumano, y supuestamente ubicada en Rumania, se presenta con un decorado de atemporalidad y aterritorialidad, en algun lugar de Centroeuropa. La produccion es multinacional, entre Rumanía, Bélgica, Francia, Holanda, e Israel.

Se puede ver completa en castellano aquí

Una escena de la pelicula: