El abuelo de Pierre Moscovici: de casta le viene al galgo

Como dice el conocido refran castellano, en el caso del nuevo ministro de hacienda francés, Pierre Moscovici, su reformismo al servicio de la oligarquía le viene de antaño, y en Rumania su abuelo Ilie ya fue un personaje principal de la socialdemocracia en ciernes y de los intentos de la "izquierda" de evitar una revolución obrera.

El abuelo

El nieto de Ilie Moscovici (1885-1943) militó en un principio en la Liga Revolucionaria Comunista francesa, pero, como reconoció mas tarde, como se puede leer en El País "se subió al carro del miterrandismo en el momento justo", en 1984. También fue alumno y discípulo de Dominique Strauss-Kahn en la Escuela Nacional de Administración (ENA, y llegaría a ser, trepando y trepando por la socialdemocracia francesa, hasta formar parte del gabinete Jospin en el ministerio de Educación Nacional,

Moscovici fue trepando poco a poco en el PS. Se convirtió en secretario segundo del partido en 1990 y en tesorero en 1992. Un año antes, había publicado con otro lider joven, llamado François Hollande, el panfleto "L'heure des choix", una crítica de la política económica del Gobierno Bérégovoy. Elegido eurodiputado en 1994, Jospin le incorporó en 1997 a la cohabitación del Gabinete socialista con la presidencia de Jacques Chirac, y le encargó de las negociaciones del Tratado de Niza y la llegada del euro.

Actualmente su escalada en la nomenklatura capitalista ha llegado hasta ocupar el importante cargo de Ministro de Finanzas con la llegada de su amigo Hollande (que hoy mismo está rindiendo cuentas ante el emperador Obama, que le estará marcando los límites y el camino a seguir, como ya hicieron con Sarkozy).

Su abuelo no llego a tanto, y no fue, como el nieto, un sostenedor tan evidente del capitalismo criminal. Pero también hizo de las suyas para evitar que la lucha de clases terminara con el triunfo de la mayoria, es decir con la toma del poder por los trabajadores. Ilie Moscovici era, como el nieto, de los que creia que una cosa es propugnar la justicia social y otra, muy diferente, hacerla efectiva con la erradicación de la explotacion por parte de los parasitos de la oligarquia del trabajo ajeno, y la prohibicion de su apropiacion de los medios de producción.

Ilie Moscovici, 1885 – 1943, fue miembro del Consejo General del Partido Social Democrata de los Trabajadores de Rumania (PSDMR).Pasó durante unos años, tambien como su nieto, por el entonces recien nacido Partido Comunista, pero pronto se cambió a un bando mas provechoso para su economia familiar, y a volver a formar parte de la Socialdemocracia parlamentaria.

El 31 de marzo de 1893 fue fundado el citado PSDMR por algunos socialistas rumanos como Ioan Nădejde, Vasile G. Morțun, Constantin Dobrogeanu-Gherea, Ion C. Frimu, Mihail Gheorghiu-Bujor, Cristian Racovski, Dimitrie Marinescu, Gheorghe Cristescu e Ilie Moscovici. Con inspiración en la socialdemocracia alemana, el PSDMR nace con la vocación de representar al proletariado rumano, centrando su programa en el logro del voto universal, el cambio de la legislacion laboral, y la reforma agraria, ademas de la lucha por la educacion gratuita obligatoria, el derecho de reunion, los impuestos progresivos por renta, y la descentralizacion. En 1899 se disolvió, aunque volveria a reconstituirse en 1910.

En 1918 parte de los socialdemocratas, que ya tenian algun diputado en el parlamento, saludaron la creacion de la Gran Rumania, tras el cambio interesado de alianzas del gobierno rumano, aunque algunos la rechazaron. Entre ellos estaba Ilie Moscovici, que permaneció sentado en su escaño mientras el resto de los diputados se levantaban aplaudiendo la proclamación de la union de Transilvania, Banat y la Republica Democratica Moldava a Rumania.

En 1921 la mayoria de los miembros de la socialdemocracia crearian el Partido Comunista Rumano, inspirandose en el triunfo de la Revolucion Sovietica y con el objetivo de organizar a la clase obrera para la toma del poder. La creacion del nuevo Partido Comunista hace que, en el I Congreso del 8 de mayo de 1921 la mayoria de sus militantes fueran detenidos por la Seguridad, la policia politica del régimen. Entre ellos estaba entonces Ilie Moscovici, junto a otros como Mihai Cruceanu, Moscu Kohn, Elek Koblos o Constantin Popovici.

Las huelgas organizadas por los obreros de todo el pais solicitando la liberacion de los detenidos logran que el rey Ferdinand I firme e indulto de los detenidos. La nueva estrategia de los gobernantes y de la oligarquia contaba con la reorganizacion de la socialdemocracia para hacer frente, desde dentro del sistema, al verdadero peligro para los privilegiados y el status quo: los comunistas.

Asi, el 7 de mayo de 1921 se decide crear un nuevo Partido Social-Democrata (PSD), entre cuyos lideres estaria el abuelo del actual ministro de finanzas de Hollande. Haciendo gala ya por entonces de las practicas habituales de lo que podriamos llamar la socialdemocracia capitalista, el PSD llego a pactar con otros partidos cercanos al fascismo y a la derecha mas reaccionaria para tocar poder y prebendas, como el Partido Nacional Campesino (PNT) o el Partido Nacional Liberal (PNL).

En las visperas de la Segunda Guerra Mundial, los socialdemocratas de Moscovici negociarian tambien con los comunistas para organizar la lucha antifascista, pero, como el resto de los partidos parlamentarios y la socialdemocracia europea en general, tenian demasiado miedo a que el ejemplo de la URSS cundiera y los trabajadores locales decidieran dejar de vivir sometidos ante los caprichos de la oligarquia y tomar el control de los medios de produccion y, por lo tanto, tomar el poder.

Ilie Moscovici moriria en 1943, en plena guerra mundial, y bajo la ocupacion nazi de Rumania, con el apoyo de la oligarquia local. Dos años despues tendria lugar lo que tanto los socialdemocratas como el como los fascistas tanto temieron: que el Partido Comunista llegara al poder y que la clase trabajadora pusiera en su sitio a los parasitos capitalistas, que tuvieron que elegir entre ponerse a trabajar o emigrar.

El nieto

Una pena que la instauración de la Republica Popular Rumana, y el creciente numero de oportunistas de toda ralea en las filas del Partido Comunista de Rumania, incluyendo antiguos socialdemocratas e incluso legionarios que cambiaron la camisa negra por la insignia roja haciendo, como hoy Pierre Moscovici, aquello de "subirse al tren" que mas corre, hizo que poco a poco el sueño de los trabajadores rumanos, el de la emancipacion, acabara minado y abocado a la reinstauracion del fascismo capitalista.

Aquella subida al tren del exito que tan bien hicieron los Moscovici, los de antes y los de ahora, lo realizaron tambien miles de comunistas rumanos que se fueron apuntando al carro del PCR para tener ciertos privilegios, entonces pequeños, durante la epoca socialista, y que corrieron a hacerse capitalistas de toda la vida cuando Estados Unidos y el traidor Gorbachov impusieron la reintroducción del capitalismo en Rumania (de hecho el 90% de los politicos de hoy y de los ultimos 20 años en la Rumania contrarrevolucionaria, la de despues de 1989, han sido y son antiguos miembros del Partido Comunista.

La realidad es que, como bien encarnan, en este caso, las historias del abuelo y el nieto Moscovici, la socialdemocracia europea, incluso la que se pone la etiqueta de "comunismo" o, la mas habitual de "izquierda", solo defienden, si es que lo hacen, a los obreros en la teoria, aunque en la practica temen tanto que sean estos los que decidan que hacer con su trabajo y que tomen el control de los medios de produccion y la riqueza, es decir, que construyan una democracia de los trabajadores, que al final se dedican en la practica a apoyar las politicas de la oligarquia, mas o menos disimuladamente, y a poner zancadillas a cualquier atisbo de tomar la ofensiva en la lucha de clases contra los privilegios de la clase dominante.

Seguro que Ilie Moscovici estaria muy orgulloso de su nieto Pierre. Todo un Ministro de Finanzas de un gobierno de la Francia capitalista en la cual aquello de la Libertad, Igualdad y Fraternidad se limita hoy a unas huecas palabras en la  letra del himno nacional y que lidera, junto a Alemania, la Europa de los mercaderes, aquella en la que,  20 años despues del final de la Union Sovietica y tambien, supuestamente, del comunismo, tan odiado por los socialdemocratas, se perpetran, auspiciadas desde las instituciones politicas, constantes y cada vez mas brutales agresiones contra los derechos de los trabajadores y los servicios publicos, que darian sin duda envidia a los lideres fascistas de mitad del siglo pasado.