Un instrumento típico de la Navidad: el buhoi

El Buhai es un instrumento parecido a la tipica zambomba de la peninsula iberica. Consiste en un cilindro cónico, a veces un simple cubo, o un pequeño barril. En un extremo se coloca una membrana de piel de oveja tensada, por la que se pasa una cuerda (tradicionalmente un mechon de pelo de caballo) con un nudo a traves de un agujero en el centro de la piel. Se clasifica como un tambor de friccion.

Aunque es tipico en las fiestas de invierno rumanas, parece que tambien se da en Ucrania y, por supuesto, en Republica Moldova. Son necesarias dos personas para tocar el buhai, aunque ultimamente se han hecho algunos mas ligeros para que sean usados por un solo individuo. El sonido emitido es como el bramido de un toro. De hecho en Moldavia, zona donde es mas comun su uso, la palabra buhai designa tambien a estos animales.

Se utiliza principalmente en las fiestas de invierno, y en concreto en año nuevo, donde los niños de los pueblos y aldeas recorrian las casas vecinas cantando el "plugusorul", unos poemas y canticos que piden y desean que el año que llega sea fructifero. Es una celebracion eminentemente agraria, e incluso el nombre viene de la palabra "plug", arado. En ella los niños desean un buen año nuevo a los campesinos representando los momentos del trabajo agricola, y los animales que participan de ellos (principalmente el toro y el buey). Asi, el buhoi representa el bramido del buey, mientras otros niños llevan un latigo con los que golpean la tierra.

En un momento el patio de las casas se llena de niños que golpean, gritan y dan latigazos en el suelo o tocan el buhoi, y a cambio de los buenos deseos reciben dulces (tradicionalmente nueces, manzanas y dulces caseros). Zdob si Zdub, el grupo moldavo del que tanto hemos hablado en este blog, nos brinda una actualizacion de estas fiestas tradicionales, donde aparece tambien el buhoi. El nombre de la cancion se llama, como no, "Plugusorul"

Os dejo con el video donde un grupo de niños celebra el "plugusor" (con latigos, un buhai, y mucho jaleo), todo un espectaculo que merece la pena conocer.