Catedral de Sf. Dimitru
Oltenia y Montenia (Tara Romaneasca)
Prefectura
En 1718 bajo los términos del Tratado de Passarowitz, Oltenia fue separada de Valaquia y anexada por la monarquía de los Habsburgo (de facto, bajo ocupación austríaca en 1716); en 1737, fue devuelta a Valaquia bajo el príncipe Constantino Mavrocordatos (tras la Guerra Austro-Turca de 1716-18 y la Guerra Austro-Turca de 1737-1739), iniciandose el periodo de los domnitores fanariotas de origen griego impuestos por el sultan. Bajo la ocupación austriaca, Oltenia fue la única parte de los Principados del Danubio (con la excepción de la Bucovina) que experimentó el despotismo ilustrado y la administración austríaca, aunque que con una gran oposición de los boyardos conservadores.
Aunque antes aclamados como liberadores, los austríacos pronto decepcionaron a los valacos al imponer una reforma administrativa, fiscal, judicial y política muy rígida que centralizaba e integraba el territorio enervando a ambos extremos del espectro social: eliminando los privilegios de los nobles e imponiendo fuertes tasas a los campesinos).
Ayuntamiento
En 1761, la residencia de los ban fue trasladada a Bucarest, de cara a un mayor centralismo (un kaymakam representaba a los boyardos en Craiova). Se mantuvo asi hasta la muerte del último ban, Barbu Văcărescu, en 1832.
En 1821, Oltenia y el condado de Gorj fueron el centro de la famosa revuelta de Tudor Vladimirescu, que dirigio una revuelta popular revolucionaria de los Ban valacos contra los domnitores fanariotas, llegando hasta la misma capital Bucarest. El asesinato de Tudor Vlademirescu acabo con la revolucion, pero supuso el fin del dominio fanariota y el origen de la idea de Rumania como pais independiente. De hecho las tropas rumanas integradas en las Brigadas Internacionales llevaron su nombre, "Tudor Vlademirescu", igual que los batallones rumanos del ejercito rojo.
Un Ban de Oltenia
Los dos últimos soberanos de Valaquia, antes de la unidad con Moldavia, Gheorghe Bibescu y Barbu Dimitrie Ştirbei, pertenecían a una importante familia boyarda de Craiova, la familia Bibescu.
Biserica de Horezu, en Oltenia
El período que siguió a las luchas por la independencia de Rumania fue un momento de auge y progreso económico y cultural y, de este modo, a finales del siglo XIX la ciudad, que ya había alcanzado los 40.000 habitantes, había desarrollado igualmente algunas pequeñas industrias (relativas a productos químicos, material agrícola y materiales de construcción), así como manufacturas textiles.
Craiova es una de las ciudades rumanas con mayor porcentaje de presencia de la minoria gitana
Economicamente, la ciudad de Craiova fue una de las mas industriales de Rumania durante el Socialismo, siendo la sede de la fabrica de coches Oltcit, que construia con licencia rumana vehiculos citroen. Tras la contrarrevolucion de 1989 pasaria a Daewoo y despues a Ford.
Foto de uno de los bulevares de la epoca Socialista
La rica historia de la ciudad, que fue una de las cunas mas importantes de lo que mas tarde será Rumania, hace que su arquitectura urbana tenga restos de gran belleza, dentro de la decandencia producida por estos 20 años de dejadez capitalista. Destaca el parque de Romanescu, con una superficie de 90 hectáreas. La maqueta de este parque, presentada por el arquitecto francés Edgar Redont, obtuvo el Gran Premio de la Exposición Universal de París (1900). Se trata del segundo parque paisajístico urbano en Europa por superficie.
El beso de Brancusi
La Prefectura se encuentra en la plaza central de la ciudad, pudiéndose admirar en esta misma plaza la estatua del hijo de Craiova y domnitor mitico de la historia rumana, Mihai Viteazul.
El Museo de Arte de Craiova posee varias esculturas de Constantin Brâncuşi, entre ellas El Beso, así como numerosos cuadros de Theodor Pallady, pintor amigo de Henri Matisse. Brâncuşi estuvo vinculado a Craiova desde los inicios de su carrera artística en los últimos años del siglo XIX, efectuando en la misma sus primeros estudios escultóricos.
Universidad de Craiova, una de las mas importantes del pais
Es una ciudad que merece la pena conocer, sobre todo por ser, quizas, la primera capital en el camino hacia lo que mas tarde se vino a llamar Rumania.
5 comentarios:
No me lo puedo creer ... Craiova ?!? Que gran sorpresa !! Mi ciudad natal ...
Ah, que bien Razvan. Una ciudad muy bonita, aunque un poco olvidada ahora que todo va para Bucarest.
Saludos
por cierto, mi profesora de rumano en Madrid era tambien de Craiova.
Craiova Craiova... además allí llegué yo en 2001 a estudiar con una beca Erasmus, como pasa el tiempo...
A ver si escribes algo sobre la historia de Motru, fue el sitio que mas me impresionó como ciudad abandonada y sin esperanza. No se si habrá cambiado mucho en estos años
Salutari tuturor craiovenilor!!
Hugo
Voy todos los años a craiova,cada vez me gusta mas ,mi marido es de alli y me encuentro muy arropada pòr la gente del lugar ,,,,,,
No me extraña, es una ciudad muy bonita. Dicen que una de las mas rumanas de Rumania (Bucarest es como decia Rebreanu a traves de sus personajes una ciudad de gran influencia turca, las ciudades transilvanias son centroeuropeas, y en Moldavia huele a influencia rusa). En fin, me alegra que te sientas bien cuando vienes por aqui
Saludos
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