Es decir, se trata de una amenaza a los trabajadores que se puede traducir como "si sigues pidiendo mas derechos me llevo la fábrica y te dejo en el paro".
Dacia nació en 1966, convirtiéndose en la marca de referencia de la Rumanía socialista, y exportándose sus vehículos a decenas de paises en desarrollo en todo el mundo. En 1999, tras el golpe de estado que reinstauró el capitalismo, y en el marco del proceso de destrucción de la industria nacional o, en todo caso, de la privatización de lo poco que quedó de ella, Renault compra las instalaciones de Dacia y la incluye en su estrategia productiva.
Las huelgas en Dacia llevan ya produciendose unas cuantas semanas, pero las negociaciones no avanzan. Parece que los trabajadores piden un aumento de sueldo de 500 lei (113 euros) al mes, pero
los gestores sólo ofrecen una cuarta parte de esta cifra, y amenaza con
trasladar la producción en otros lugares si los huelguistas no dan marcha atrás.
El vicepresidente de Dacia, Constantin Stroe, afirma que "Si es necesario, vamos a trasladar parte de su producción a otras
instalaciones en Marruecos ya que no podemos enfrentar los costos
crecientes de Rumania. Las demandas de los empleados no son realistas ". La razón, que un trabajador marroquí gana la mitad de uno rumano, que ya es decir (la media salarial rumana es de 450 euros al mes brutos, aunque los trabajadores de Dacia ganan de media unos 800 euros brutos por mes).
Los trabajadores no solo se quejan de sus bajos salarios (en relación a los trabajadores de Renault en Francia, por ejemplo), sino a que les han reducido el tiempo en el que deben producir un coche a 40 segundos. Se trata de aumentar como sea la tasa de beneficio a costa del emperoamiento de las condiciones y, si es posible, tambien de los salarios de los trabajadores; es decir, de la ley esencial del capitalismo, que motivo que las grandes empresas de los paises capitalistas trasladaran sus fabricas a otros paises donde se pudieran aprovechar mas de la fuerza de trabajo de los empleados hasta que aparezcan otros todavia mas baratos y con menores exigencias de derechos y nivel de bienestar.
Mientras el beneficio se amplia a costa de la reducción de los costes laborales, los capitalistas viven cada vez mejor mientras a la vez se reducen los gastos sociales de los gobiernos para desviarlos a las empresas privadas.
No se trata de crisis de ventas o de reducción de beneficios, puesto que la francesa Dacia daumento un 4,8 por ciento sus ventas el año
pasado en comparación con 2011, en alrededor de 360.000 unidades. Alrededor del 6 por ciento se vendieron en Rumania., y el resto se exportó - a Francia el 23 por ciento de las ventas, a Alemania - el 13 por ciento, y el resto principalmente a Argelia, Turquía o Italia).
La verdadera razón es, como está pasando en toda Europa, que con la excusa de la crisis los capitalistas están recuperando, ante la pasividad de la clase trabajadora, sobre cuya conciencia de clase se ha realizado un efectivo trabajo previo de brutal desideologización y, en consecuencia, desorganización, todo lo que tuvieron que cederles antes de 1990 ante la presión, como modelo economico y social, de la URSS y sus aliados. Tras el derrumbe del estado soviético, la clase parasitaria no siente ya ningún temor y no sigue dispuesta a compartir con los que producen la riqueza tanto porcentaje de esta como hacian antes para evitar que cada vez mas obreros quisieran vivir como sus hermanos de los paises socialistas.
El capitalismo ya no tiene por qué ocultar su verdadero rostro fascista, y los capitalistas no están ya obligados a mantener a los que sostienen sus privilegios con su trabajo haciendoles creerse parte de la clase media, por lo que pueden apropiarse también del pequeño porcentaje que se destinaba al falso "sueño de ser burgues" de la clase trabajadora y a los gastos sociales de los estados nacionales, que ahora vuelven a derivarse, como antes de la Segunda Guerra Mundial y del triunfo militar de la URSS contra el capitalismo, a los bolsillos de los grandes parásitos y criminales económicos.
El problema es que tiene razón el gestor de Dacia cuando dice "los trabajadores no son realistas". Llevan años siendo demasiado inocentes, y parece que no se dan cuenta, no abren los ojos, a la realidad de que dia a dia pierden derechos, empleos, salarios y bienestar, y de que todo eso se debe a su desclasamiento, a su asunción de la forma de ver las cosas de la clase dirigente y de la demonización del comunismo, y a la falta de organización del movimiento obrero. Solo luchando por los derechos de la clase obrera como clase, y no por problemas individuales y locales aisladamente, como el de el salario o los despidos concretos de una determinada empresa, se puede vencer a la ambición y falta de escrúpulos de los que viven sin dar palo al agua a costa del trabajo ajeno y de la miseria global.
Fte: Balkaninsight.com
2 comentarios:
J.L. aunque no venga a cuento de la entrada .... está mas o menos bien traducida ésta canción: https://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=KztDBAlr38E
??
gracias
Hola Anonimo,
Nosotros hicimos la traducción en 2011. Puedes ver el video a continuación:
http://imbratisare.blogspot.ro/2011/02/locul-potrivit-de-guess-who-con.html
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